Polifonia.org | (CM). Ahora que se vive una pequeña pausa en la burbuja creada en la industria de procesamiento alrededor de la inteligencia artificial, emerge la computación cuántica, al parecer, como la próxima estación a visitar.
Podría parecer exagerado la proyección que realiza la consultora McKinsey, acerca de la enorme oportunidad de mercado que representa la computación cuántica, cuando la estima en dos billones de dólares.
Como en el caso de la aplicación vital de la litografía y la proyección de luz para desarrollar semiconductores (ASML), existe una empresa que parece apuntar a ser precursora en los próximos años en el sector de la computación cuántica.
Incubada en la Universidad de Sydney.
Se trata de la compañía australiana Q-CTRL. Se formó en el seno de un grupo de investigación de Ciencias Cuánticas de la Universidad de Sydney. El equipo logró acceder al apoyo de compañías de capital riesgo globales. El hecho es que, de acuerdo con la Universidad de Sydney, se ha vuelto un “proveedor de confianza” de las industrias que emplean tecnologías cuánticas emergentes.
Incluso, se aventura a anunciar:

“Desarrollamos nuevas formas de IA para acceder al reino cuántico y controlarlo. Gracias a nuestra tecnología única, investigación pionera y demostraciones reales del valor cuántico, lideramos la ola más importante del desarrollo de la tecnología de IA”.
Los inversionistas detrás de Q-CTRL son, entre otros, Lockheed Martin (compañía estadounidense global de seguridad y aeroespacial), Sierra Ventures y Sales Force Ventures.
¿Qué ofrece Q-CTRL?
En esencia, Q-CTRL ofrece una suite que se enfoca en dos campos de actividad y cinco espacios de aplicación.
Lo dos campos son: la computación cuántica y la navegación cuántica.
Las soluciones ofrecidas para aplicación son: Diseño, construcción y aprendizaje de computación cuántica. Desarrollo de algoritmos para ambientes cuánticos. Y el producto estrella de momento, la llamada navegación sin GPS.
La apuesta cuántica en proyección.
La apuesta de esta empresa australiana está colocada en la navegación cuántica. Ésta la basa en sensores cuánticos sensibles para detectar la propiedades de la tierra que desde siglos atrás han sido desetimados.
Asombroso. Nos referimos a posibilidad de contar con una herramienta que pueda comparar las variaciones magnéticas y gravitatorias del territorio horizontal. Pero también identificar las ubicaciones con precisión. Así se asocia la información particular para cada colina y cada valle de la tierra.
Se trata de un método de navegación cuántica con gran potencial para la navegación aérea (e infortunadamente también para la defensa). No emite, ni requiere señales que dependan de la vigencia diurna o nocturna.

El pasado mes de abril (2025), la plataforma de publicaciones que alberga la Cornell University (Arxiv) publicó un artículo en el que reconoce ventajas. Plantea que la navegación cuántica, basada en fundamentos magnéticos, augura una mayor precisión que las de navegación inercial con grado estratégico (entre ellas el GPS).
Lo que se aprecia es una creciente convergencia en las tecnologías cuántica y de inteligencia artificial. Una convergencia que sin duda se encontrará en algún momento con los requerimientos de las incursiones espaciales y el desarrollo de la navegación respaldada por señales satelitales.
Fuentes: Q-CTRL, “GPS-free quantum navigation”. Murat Muradoglu y otros, “Quantum-assured magnetic navigation achieves positioning accuracy better than a strategic-grade INS in airborne and ground-based field trials”, en arXiv:2504.08167, abril, 2025. The University of Sydney, “Q-CTRL – a quantum technology company“.
Imágenes: Q-CTRL.
Imagen de la portada: generada por Gemini.
Texto: Editor.








